Utilizamos cookies propias y de terceros para ofrecer un correcto funcionamiento y una navegabilidad óptima.
Para más información, consulta nuestra política de cookies.
ACEPTAR TODAS LAS COOKIES
CONFIGURAR LAS COOKIES A UTILIZAR
Salud, calidad de vida y bienestar animal  >  Igualdad y diversidad  >  Blog  > Mujeres Migrantes, Feminización de la migración

Mujeres Migrantes, Feminización de la migración

24 ENERO 2022

¿Has pensado alguna vez por qué surgen los flujos migratorios?, ¿Cuántas de esas personas que migran viven en nuestro país?, cuántas de ellas son mujeres?, ¿Cuáles ha sido las circunstancias que las han llevado a emigrar?, ¿A qué trabajos acceden?, ¿Cuál es su situación real en España?. Éstas y otras cuestiones queremos abordarlas en este espacio semanal con la necesidad de visibilizar  la discriminación que sufren las mujeres migrantes.

España, según datos del Instituto Nacional de Estadística, a fecha de enero de 2021, cuenta  con un total de 5,4 millones de personas extranjeras, de las cuáles  2,7 millones son mujeres. En Canarias, específicamente, viven 286.551 personas, de las cuales 144.874 son mujeres. 

Y es que, el movimiento migratorio es un fenómeno que siempre ha existido. Es un hecho que se ha producido a lo largo de la evolución de la humanidad. Los motivos para emigrar son diversos, desde la búsqueda de una vida mejor, una mejora de las condiciones laborales, la búsqueda trabajos con mejor perspectiva o con mejor remuneración económica, la búsqueda de refugio o simplemente la huida de desastres naturales, guerras, etc.

Aunque actualmente la gran mayoría de personas que se mudan siguen siendo migrantes que se trasladan de unas zonas a otras de su propio país o países cercanos, las personas  migrantes internacionales llegan a ser hasta 200 millones de personas, según datos ofrecidos por Cáritas Internationalis.

Pero, ¿De qué hablamos cuando hacemos referencia a la feminización de las migraciones?

Hace unos días, las noticias de Canarias se hacían eco de este fenómeno exponiendo como titulares destacados los siguientes: “Las costas canarias reciben el triple de mujeres migrantes que hace un año”, Periódico El Día, o “La llegada de mujeres migrantes se triplica en un año” Diario La Provincia.

Ambas noticias hacían referencia a un fenómeno que se denomina “Feminización de las migraciones” que hace alusión a la importancia en el reconocimiento de la influencia del género en el fenómeno migratorio.

Cada vez más, existe una tendencia en los flujos migratorios internacionales en el que muchas mujeres se trasladan de un país a otro de forma independiente, muchas veces en busca de empleos que las convierte en uno de los principales sustentos económicos de sus familias. Además, en las últimas décadas han emigrado por motivos laborales propios y no como dependientes o para reunirse con sus familias en el exterior.

Pero este hecho no hace que cuando llegan a un nuevo país estén exentas de sufrir discriminaciones de diferente tipo por el simple hecho de ser mujer.

A muchas de ellas no se les reconoce su titulación académica, ni su formación laboral, por lo que deben comenzar de nuevo ante una sociedad patriarcal que lo único que les ofrece son trabajos en sectores feminizados como el servicio doméstico y  la prestación de cuidados.

Debemos destacar además, haciendo alusión a diversos informes internacionales que otras formas migratorias específicamente femeninas incluyen la migración y la trata de mujeres para la industria del sexo y la migración por matrimonio.

No podemos olvidar, como bien plantean  las personas expertas en esta temática,  que este fenómeno no es una cuestión únicamente estadística, sino que debe tenerse en cuenta temas tan importantes como, el papel que cumple el género en los procesos migratorios, el costo social de la migración, las políticas laborales de los países emigrantes y receptores que inciden en cuestiones de género, y las remesas enviadas por las trabajadoras migrantes.

Y es que la demanda y la oferta de mano de obra de las mujeres migrantes se ven afectadas por normas de género desiguales en el mercado laboral. Y aunque  el fenómeno migratorio puede liberar a las mujeres migrantes del control familiar y los roles de género, también debe tenerse en cuenta que son ellas las que se  convierten en las sustentadoras económicas de la familia, no solo en el extranjero sino también en el lugar  al que  emigran.

Además, debemos tener en cuenta que es más probable que las mujeres migrantes terminen en trabajos para los cuales están sobrecalificadas, un fenómeno conocido como la descalificación. Atendiendo a un estudio realizado en cuanto al desperdicio de habilidades de los inmigrantes altamente calificados en los Estados Unidos se estimó que entre 2009 y 2013, el 32% de las mujeres educadas en el extranjero y el 27% de los hombres educados en el extranjero estaban subempleados o desempleados, en comparación con el 21% de las mujeres y los hombres educados en los Estados Unidos.

Si atendemos al trabajo de los cuidados, destacan datos como “En los Estados Unidos, más de una cuarta parte de los trabajadores de la asistencia domiciliaria son inmigrantes, y el 85% de ellos son mujeres. Muchas mujeres migrantes, que una vez fueron profesionales, trabajan en empleos muy por debajo de su nivel de competencia, por ejemplo, como asistentes de cuidado. Son penalizadas por dificultades lingüísticas percibidas o reales y sufren discriminación”.

Ante este fenómeno  se debe potenciar desde las instituciones, tanto públicas como privadas, diversas estrategias que permitan acabar con la discriminación que sufren las mujeres migrantes y luchar conjuntamente contra la vulneración de los derechos laborales que las asisten.

Se pueden plantear además, mejoras en los acuerdos internacionales de reconocimiento mutuo de calificaciones para guiar la evaluación de habilidades y el reconocimiento de la formación recibida, independientemente del país donde se halla desarrollado dicha formación.

Finalmente, cabe destacar que a medida que  existe una mayor afluencia de mujeres que deciden emigrar para trabajar,  también desempeñan un papel cada vez más crítico en su rol familiar, así como en el desarrollo económico de sus países.  Por todo ello, es primordial tener en cuenta la importancia del género en este fenómeno mundial. Sólo así podremos visibilizar la la realidad de las mujeres en el proceso migratorio y ser conscientes de las dificultades con las que se encuentran y plantear acciones que acaben con las discriminaciones que surgen ante esta realidad social.

 Atendiendo al manifiesto #NOSOMOSUNCASOAISLADO queremos destacar las siguientes palabras:

“Ninguna de nosotras debe morir ahogada en un océano, deshidratada en el árido desierto, ni prisionera en un CIE, por perseguir nuestros sueños. ¡La lucha sigue, que no nos cueste la vida!”  .

 

Finalizamos este post recordando que desde la Concejalía de Igualdad del Ayuntamiento de Adeje, a través del proyecto  #AdejeIgualdad comunica, en colaboración con la Asociación Factoría Social y, financiado a cargo de los créditos del Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad, a través de la Secretaría de Estado de Igualdad, expone este tipo de proyectos con la finalidad de continuar trabajando en la igualdad de oportunidades para ambos sexos, desde todos los ámbitos y con todos los/as agentes claves con la intención de ofrecer una realidad más justa y neutral.


C/ Grande, 1   38670, Adeje
Horario: 8:00 - 15:00 h