Esta semana abrimos este espacio a la igualdad en el ámbito literario, poniendo especial atención al proyecto “Escritoras por la Igualdad, Mujer tendrías que ser”.
Este proyecto ubicado en Almería aborda el trabajo de veinte escritoras unidas por la igualdad de género en la publicación del libro “Mujer tendrías que ser”.
Y es que, la literatura es un medio en el que las personas pueden generar nuevas formas de entender la realidad, puede tener un efecto trasformador y crítico en cuanto a las vivencias diarias y ser motor de cambio.
Incorporar a la literatura la perspectiva de género es fundamental para reconocer el trabajo, que muchas veces ha sido invisibilizado de escritoras y profesionales de este sector. Es necesario contar la realidad desde esta visión, más equilibrada y justa, si pretendemos acercarnos a la IGUALDAD REAL de la que tanto hablamos.
Tengamos en cuenta algunos datos:
- El premio Nobel de Literatura, desde su creación en 1901 hasta 2017 ha premiado a 14 mujeres frente a 100 hombres.
- El Premio Cervantes, tan sólo ha galardonado a cuatro mujeres frente a 38 hombres desde que se instauró en 1976.
- El Premio Planeta, ha distinguido a 17 mujeres desde 1952.
- En la Real Academia Española, en toda su historia, sólo once mujeres han sido –o son– académicas de la RAE.
Es importante destacar además, que las mujeres durante siglos, han escrito bajo seudónimos, debido a que socialmente no estaba “bien visto” superar intelectualmente a un hombre. Hecho que ha repercutido a la hora de publicar sus obras bajo seudónimos masculinos para ocultar su identidad.
Si a esto le añadimos que necesitaban independencia y capacidad económica, tiempo y espacio propio que les permitiera escribir, no todas las mujeres que pudieron formar parte de este ámbito lograron hacerlo.
Así lo resumía Virginia Woolf en una cita de su obra “Una habitación propia”:
"Una mujer debe tener dinero y una habitación propia si desea escribir”.
Por todo ello, no cabe duda, que debemos continuar trabajando, para que en un área tan importante como es la literatura, la presencia de mujeres sea cada vez mayor y podamos visibilizar su papel en ella.
Es así, como en este post, queremos destacar la unión de veinte autoras con un mismo mensaje hacia la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres en su obra “Mujer tendrías que ser”.
¿En qué consiste este proyecto de igualdad en el ámbito literario?
El proyecto surge de la unión de veinte escritoras almerienses en la publicación de un libro, perteneciente a la editorial Guante Blanco, en el que se recogen las historias y reflexiones en cuanto a la igualdad de oportunidades para ambos sexos.
El libro pretende promover, en sus lectores y lectoras, una reflexión crítica, constructiva y reivindicativa en cuanto a la igualdad de oportunidades para mujeres y hombres.
El prólogo del mismo incide en que este material está dedicado a «la niña de la que se ríen porque quiere jugar con los niños, la joven que llama a su amiga al cruzar el portal de su casa para decirle que ha llegado bien, la joven a la que violan porque iba provocando, la madre que abandona a sus hijos porque prefiere trabajar, la hija que apenas ve a su madre porque cuando se despierta ya se ha ido a trabajar, la mujer que triunfa en su trabajo a saber cómo, la universitaria que deja la puerta del despacho abierta, la mujer a la que pitan desconocidos en coche por la calle, la abuela que recoge a sus nietos cada día del colegio, la mujer fracasada socialmente porque ha decidido no tener hijos, la mujer sumisa que se queda en casa y no quiere trabajar, la mujer a la que no toman en serio en el trabajo, la mujer que se cambia de ropa tres veces antes de salir porque sabe que la van a criticar, la mujer que se prostituye porque ella quiere, la mujer que denuncia malos tratos una y otra vez hasta que aparece asesinada... Vamos a darle la vuelta: mujeres tendríais que ser para poder poneros en esta piel».
¿Por qué surge “Mujer tendrías que ser”?
El responsable de la editorial en una entrevista publicada en el Diario Almería explicaba que: “Surgió de casualidad —plantea Óscar Fábrega, responsable de la editorial—. Un día, en la oficina, hablando con Alberto Cerezuela, director del Grupo Círculo Rojo, nos llamó la atención la gran cantidad de escritoras que hay en la provincia de Almería. Por otro lado, ambos estamos totalmente concienciados en la necesidad de seguir luchando por la igualdad de derechos entre hombres y mujeres y contra la lacra de la violencia machista. Así fue como decidimos que estaría guay coordinar una antología literaria con relatos y poemas de escritoras de Almería, cuya única línea temática fuese, simplemente, la problemática en general de la mujer”.
Es así como surge este proyecto, que parte de la reflexión conjunta sobre las diferentes problemáticas que surgen desde la desigualdad entre mujeres y hombres, y que, desde la editorial, tuvieron presente desde su propia concienciación e implicación con el cambio social hacia nuevos modelos igualitarios.
¿Quiénes han participado en el proyecto?
A esta iniciativa se unen veinte escritoras almerienses con la clara intención de reivindicar, desde la “trinchera de las letras”, la lucha por la igualdad.
Esta antología lo firman las siguientes autoras: Alicia Cerezuela, Carmen López, Carmen Amat, Candela Tuck, Pilar Quirosa-Cheyrouze, María del Pilar López, Caterina Chevalier, Pilar Barberá, Concha Castro, Mª Jesús Orbegozo, Eva Castillo, María del Mar Saldaña, Remedios Martínez, Gloria Langle, María Campra, Jessica García, María Ángeles Lonardi, Josefina Góngora, Mar Montoya, Rocío Juárez y Mar Verdejo.
¿A quién va destinado los beneficios de este proyecto?
Los beneficios de esta obra se han donado a AIMUR, una Asociación de Mujeres de Almería, que se constituyó en febrero del año 2001 para luchar por la igualdad y la defensa de los derechos de las mujeres más vulnerables.
La Asociación AIMUR está formado por un equipo multidisciplinar de trabajadoras sociales, abogada, psicóloga, educadoras y mediadoras, que trabajan a diario de forma coordinada, para dar una respuesta integral a las necesidades planteadas por las mujeres.
Es una asociación que trabaja con mujeres en situación de exclusión social y marginalidad, y de manera casi exclusiva con mujeres víctimas de tráfico con fines de explotación sexual ofreciéndoles como bien explicitan en sus redes “una atención integral considerando a las mujeres víctimas de trata como sujetos de protección, de derechos y de reparación, independientemente de su colaboración policial o judicial”.
Hemos destacado este proyecto como representante de la palabra “SORORIDAD”, que no es más que, la relación de solidaridad entre las mujeres, especialmente en la lucha por su empoderamiento. No podemos olvidar que para que exista un cambio real hacia la igualdad en la sociedad, debemos partir de la unidad de todos los sectores profesionales, de la visibilización de las profesionales en cada uno de ellos y de la importancia de crear nuevas formas de equilibrar esta sociedad desigualitaria.
Finalizamos este post recordando que desde la Concejalía de Igualdad del Ayuntamiento de Adeje, a través del proyecto #AdejeIgualdad comunica, en colaboración con la Asociación Factoría Social y, financiado a cargo de los créditos del Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad, a través de la Secretaría de Estado de Igualdad, expone este tipo de proyectos con la finalidad de continuar trabajando en la igualdad de oportunidades para ambos sexos, desde todos los ámbitos y con todos los/as agentes claves con la intención de ofrecer una realidad más justa y neutral.
